Madame Bovary (1856), Gustave Flaubert

 

"Madame Bovary"  (1856)

Gustave Flaubert  (Normandía, Francia 1821-1880)

Ed. Espasa - Col. Austral 2014, 448 pág.


Obra cumbre de la literatura francesa y universal. Fue publicada primero por entregas durante 1856 y como libro al año siguiente.

La novela empieza con la llegada al colegio del provinciano Charles Bovary. El narrador es un compañero de clase que asiste al lamentable espectáculo de Charles intentando no desentonar en el mundo que le rodea. La mirada es distante y poco indulgente, pero comprensiva y de ninguna manera cruel.

El narrador después se desfigura y se convierte en un narrador observador que mantiene el mismo punto de vista. Se nos cuenta la historia familiar de Charles, sus padres y su infancia. Sus escasos estudios de medicina y su primer matrimonio por interés. Cómo conoce a su segunda mujer Emma (Madame Bovary) y se enamora de ella. La muerte de su primera mujer favorece el matrimonio con la segunda.

Emma es también una joven provinciana, pero con una belleza destacable. Se casa con Charles porque es muy joven y en aquel momento parece la mejor opción. Sin embargo, en su cabeza bullen ansias novelescas de un romanticismo amoroso provocadas por lecturas apasionadas que nublan su juicio. Charles es un mal médico de pueblo incapaz de darse cuenta o de satisfacer las fantasías de su mujer. Tanto de nivel económico, como amatorias.

Emma primero disfruta de un amor extramatrimonial platónico. Luego otra aventura ya carnal con otro hombre. Después vuelve a encontrar al primero y consuma. Son amores vehementes y agotantes para las dos personas, que Emma trata de sublimar aunque sea consciente que todo es evanescente. Por otro lado, se entrega a gastos económicos por encima de su capacidad que acaban por convertirse en una montaña de deudas y problemas con la justicia.

Toda esta situación transcurre ante los ojos de Charles que es incapaz de ver nada. Ama a su mujer sin dobleces y todo lo que hace es maravilloso porque es hermosa. 

Junto a la pareja protagonista aparecen multitud de personajes, que el talento de Flaubert sabe dotar de una riquísima vida propia. Todos ellos componen un fresco de la época que aparece ante nuestros ojos con una frescura y una presencia contundente gracias a la extraordinaria capacidad de detalle de la prosa del autor.

También es verdad, que esta riqueza en la descripción de los detalles que puede resultar algo apabullante es interesante para nosotros porque nos permite situarnos en el siglo XIX. En nuestros días, George Perec en "La vida instrucciones de uso" hace algo parecido y resulta fascinante pero algo pesado.

Emma Rouault, después Bovary, no aparece en la narración hasta la página 83 y lo hace de forma anodina. El padre ha sufrido una fractura de pierna y Charles Bovary es llamado para curarlo:

"Mademoiselle Emma trataba de coser unas almohadillas. Como tardaba mucho en encontrar su costurero, el padre se impacientó. Ella no respondió, pero cuando se puso a coser, se pinchó varias veces los dedos y cada vez que le ocurría, se los llevaba a la boca y los chupaba..."

Torpe y encantadora. Emma muere en la página 422 y Charles prácticamente en la última página. Por lo que la sensación es de que hablamos de la vida de Charles y no la de Emma, pero el carácter de la protagonista está tan bien definido, es un arquetipo literario tan bien creado, tan contradictorio, tan desgraciado...

Se suele decir que el carácter Emma es la consecuencia de sus lecturas de novelas de amor. No estoy de acuerdo. Emma tiene un temperamento nervioso, voluble e inflamado. Lee porque es la distracción que tiene más a mano, pero la visita y el baile en la casa del vizconde tiene una influencia casi mayor en su mente, porque sabe que es real.

Como dice Charles en quizá su única frase afortunada :

¡Fue culpa de la fatalidad!

Hay que agradecer a la colección de bolsillo Austral esta edición (y traducción) a cargo de Juan Bravo Castillo que destaca por su cuidado y calidad, notas, introducción, bibliografía y por su más que asequible precio.

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